JOSÉ LUIS RAMOS ISASI
De los ocho equipos que nuestro Club ha federado este año, solo nosotros jugamos el partido de ayer domingo con un claro dramatismo, pues el descenso a Tercera no es una opción para nosotros.
El “A” juega con la tranquilidad de saberse campeón del grupo de Preferente pase lo que pase y con el ascenso a División de Honor en el bolsillo. Reciben al Tajamar B, club que necesita ganar o empatar para certificar el ascenso. El “B”, por su parte, ya sabe desde hace días que el descenso a Primera es inevitable y solo le queda jugar por intentar hacer una buena jornada.
El “D” también juega por el simple placer de jugar y ponerle lo más difícil posible el ascenso a su visitante, el Agustiniano, sabiendo que su descenso a Tercera es cosa hecha desde hace un par de jornadas. Y los cuatro equipos de Tercera también juegan sin compromiso alguno, dado que ninguno de ellos tiene posibilidad de ascenso.
Así pues, cuando iniciamos el partido contra Parla B, somos conscientes de que tenemos que ganar y que ellos no se juegan nada. Incluso han venido solo cinco jugadores por lo que empezar sabiendo que ganamos 1-0 es un alivio. Además, pienso para mí, tenemos el apoyo de todo el Club, incluidas esas musas inspiradoras que hoy (por ayer domingo) llenan el recinto de juego y que hacen de cada jornada jugada en casa motivo de fiesta.
Yo juego en segundo tablero, con negras, contra un antiguo compañero de club, de hace aproximadamente unos cuarenta años, cuando existía en Getafe el club de ajedrez Xatafe y que desapareció unos años más tarde. Joaquín ahora juega en el Parla y me dice que no juega mucho en los últimos tiempos y eso se nota pues le gano en poco tiempo. 2-0
Víctor, nuestro primer tablero, capitán del “B” y del “E”, ofrece tablas al poco rato y se las aceptan pues la posición no da para mucho más tras solucionar Víctor una peligrosa situación. 2,5 – 0,5
El punto decisivo para ganar el partido y asegurarnos la permanencia lo aporta Juan que con paciencia lleva la partida a un final en el que se impone por experiencia y sabiduría a su rival. 3,5 – 0,5
Y para rematar la faena, Álvaro y finalmente Sergio culminan el 5,5-0,5 final que nos lleva en volandas a la inmensa alegría del trabajo bien finalizado, a las fotos grupales del Club, de equipo y a la fiesta final con todos los jugadores, padres, madres y demás visitantes que brindan con nosotros por muchos años más de competición y existencia de un Club que es, simplemente, un grupo de amigos que juegan ajedrez.