JOSÉ LUIS RAMOS
Disputar una nueva jornada en casa (la séptima ya de la Liga Regular), con los magníficos siete equipos del Club Ajedrez Getafe «batallando», es garantía de espectáculo y anécdotas. Joaquín, un amigo del Club de Parla que ayer domingo nos visitaba, expresaba su admiración por ello: “¡Vaya fiesta de ajedrez que tenéis aquí montada!”.
Nuestro equipo, el Getafe «C», jugaba contra Pueblo Nuevo y enseguida, casi sin tiempo de culminar el desarrollo de mi partida, vi de reojo que Andrés estrechaba la mano del contrario que había rendido su rey. Lo cierto es que no pude ver nada de su partida. Visto y no visto. Empezábamos fuerte, pues una media hora después Óscar ganaba su partida y nos poníamos en franca ventaja, aunque Juan pasaba por dificultades y yo mismo perdía calidad.
Me tranquilizaba ver que Álvaro ganaba calidad y el partido estaba muy ajustado, pero no parecía perdido, aunque tampoco me podía imaginar en ese momento que el resultado sería un engañoso 5-0.
En mi partida, mi rival no podía aprovechar las columnas abiertas con sus torres, dado que mi alfil blanco centralizado, y apuntando directamente al enroque, era causa de muchas precauciones; tantas que, finalmente, cometió una imprecisión suficiente como para tener que rendirse.
Juan pidió tablas a su contrario por repetición de jugadas y éste dijo que no se había repetido tres veces la misma posición, lo que llevó a la intervención de Sergio como árbitro para dilucilar la cuestión. La partida se tuvo que seguir jugando, pues Sergio comprobó que las planillas no coincidían en las anotaciones de las jugadas y, por tanto, no se podía comprobar a ciencia cierta lo sucedido.
Continuada la partida, ya que el rival de Juan no aceptó el ofrecimiento de tablas, desembocó en la victoria de mi compañero en un descuido del contrario. Y Álvaro, por no ser menos, hizo valer su calidad de ventaja, obligando al abandono del rival.
Con el mismo resultado que nosotros, el Getafe “D” ganó 5-0 a Torrelodones con buenas sensaciones de equipo grande que aspira a todo.
El resto de los partidos de los equipos de Tercera se cuenta por derrotas. No tuvo suerte el Getafe “E” contra Sierra Norte, pues a falta de una partida iban empatados 2-2, pero Víctor se despistó en una posición favorable y el partido se fue al lado contrario. Los más pequeños del “F” y del “G” vendieron cara sus derrotas ante Virgen de Atocha y Jaque Mate, respectivamente. Esta vez, su esfuerzo no tuvo recompensa.
En Primera División, nuestro equipo del “B” ganó sufriendo al Capablanca para seguir firme en el primer puesto con todas las aspiraciones de ascenso intactas. Y, finalmente, en Preferente, el Parla fue la víctima de nuestro equipo “A”, que escala un peldaño para seguir optando a los dos primeros puestos que dan opciones al ascenso a División de Honor.
Con todo, el balance de ayer domingo fue tremendamente positivo para los objetivos que nos hemos marcado esta temporada.
¡Qué siga el espectáculo!
