Ayer, tras recoger todo y dejarlo bien guardado en el armario, mi sentimiento era de que había sido un día de mala suerte. Ya sé que hablar de suerte en ajedrez es, como mínimo, pretencioso, pero fueron muchas malas suertes, una detrás de otra, las que tuvimos ayer:
Para empezar, un pequeño malentendido con la coordinación del centro nos obligó a empezar las partidas de los nueve equipos con tiempo de menos en nuestros relojes. Si a las 10.00 no está todo listo para el inicio de las partidas, el árbitro, aplicando el reglamento, no tiene otro remedio que descontarnos el tiempo a los equipos de casa. A todos, sin excepción. Y gracias a que estábamos muchos en la puerta esperando, fue posible organizar y disponer todo en muy breve plazo de tiempo, lo que hizo que «solo» perdiésemos 10 minutos de nuestro reloj.
Mientras revisaba que todas las actas y planillas estuviesen en su lugar, el árbitro me comentaba que si le hubiesen preguntado por el resultado de nuestro equipo en DH, habría apostado sin dudar por la victoria pero esas batallas aparentemente ganadas se vuelcan inopinadamente a favor del contrario cuando más importante es el momento. Y eso le pasó a nuestro A : 2.5-3.5 a favor del V Centenario.
En Primera, nuestro equipo no pudo luchar mucho pues solo iniciaron el encuentro cuatro titulares del equipo y los otros dos tableros los cubrieron Javier, del E y Andrés, del C. Ya éramos conscientes de que nuestro equipo en Primera estaba corto de efectivos pero fallar dos titulares el mismo domingo y en casa es otra mala suerte. Getafe B – 1 – Móstoles 5.
En Segunda división, nuestro C perdió por el mismo resultado 1-5 con el A,V.A. que se está convirtiendo en nuestra particular bestia negra. Al menos dos partidas en las que teníamos clara ventaja se torcieron cayendo de parte del rival. Más mala suerte, pues una es casualidad pero tantas…
Es en Tercera en donde, por fin, encontramos que, de los seis equipos participantes, dos ganaron y uno hizo tablas. Los compañeros del D arrasaron 4-1 al Fuenlabrada B; en su batalla contra CATM San Agustín, los muchachos del E rozaron las tablas pero perdieron por la mínima 2-3. Por su parte el equipo F aportó las tablas del día en su encuentro contra Valdemoro 2.5 – 2.5 pero dejamos constancia de que Fernando lamentó su derrota inexplicable y Blas seguía teniendo la sensación de que podía haber ganado, incluso tras el análisis de la partida. En la sala 4 se acomodaron los tres restantes equipos, los más pequeños, con una victoria del G sobre Colegio Alkor 3-2. El H perdía sin paliativos 0.5-4.5 con Algete 2008 y, finalmente, El I perdió también 1.5 – 3.5 con su rival de Torrejón. En este último partido, con el partido 1.5-2.5, bien pudieron haberse dado las tablas si Lucía hubiese tenido un poco más de fortuna en el final. Parecía que lo ganaba cómoda, mas los peones que van camino de la coronación se revolvieron y dieron al traste con lo que parecía un empate merecido. Por cierto que tuvimos que presentar una reclamación al árbitro pues el contrario de Lucía dejó de apuntar, sin justificación, las jugadas en su planilla y le recordaron que es obligatorio hacerlo.
Como resumen 6 derrotas, 2 victorias y 1 tablas. Puesto así parece malo pero en realidad es solo el resultado de un magnífico día de ajedrez en nuestro centro cívico. Aunque matizando, eso sí, que la diosa Caissa no estuvo de nuestro lado en este día que da entrada a las vacaciones de Navidad y cambio de Año.
¡Felices Fiestas compañeros y que Caissa nos traiga un exitoso 2020!